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¿Qué es la alopecia androgénica?

16/01/2025

La caída del cabello es una de esas preocupaciones que muchos enfrentamos en algún momento de la vida. Y entre las diferentes causas de pérdida capilar, la alopecia androgénica es de las más frecuentes. 

Pero, ¿qué significa realmente este término tan técnico? En este artículo, te explicaremos qué es la alopecia androgénica, por qué ocurre, y qué opciones existen para tratarla. ¡Comencemos!

Entendiendo la alopecia androgénica

La alopecia androgénica, o como muchos la conocen, la calvicie de patrón masculino o femenino, es una condición hereditaria que provoca una pérdida gradual del cabello. Y si bien, puede afectar tanto a hombres como a mujeres, se presenta de forma distinta en cada uno. 

Causas de la alopecia androgénica

La principal causa de esta condición es la predisposición genética. Si tienes familiares cercanos que la han experimentado, las probabilidades de que también la desarrolles son altas. Así mismo, los niveles de dihidrotestosterona (DHT), un derivado de la testosterona, juegan un papel crucial en la miniaturización de los folículos pilosos.

Factores como el estrés, una dieta desequilibrada y ciertos medicamentos también pueden agravar la pérdida de cabello. Sin embargo, es importante distinguir estos factores de la causa principal: la sensibilidad genética de los folículos a los andrógenos.

Síntomas de la alopecia androgénica y cómo identificarla

La alopecia androgénica no aparece de la noche a la mañana. Los primeros signos pueden ser sutiles, como un cabello que pierde grosor o un aumento en la cantidad de pelos que se caen durante el lavado o el cepillado.

En los hombres, suele comenzar con un retroceso de la línea del cabello, formando entradas, y una reducción del volumen en la coronilla. En las mujeres, el patrón es distinto: se nota una disminución del grosor general, sobre todo en la parte superior de la cabeza, mientras la línea frontal permanece intacta.

Opciones de tratamiento disponibles para la alopecia androgénica

Por suerte, hay diversos tratamientos disponibles para abordar la alopecia androgénica. Los más comunes incluyen:

  • Medicamentos tópicos y orales: El Minoxidil y el Finasteride son dos de las alternativas más prescritas. El primero estimula el crecimiento capilar, mientras que el segundo actúa reduciendo los niveles de DHT.
  • Mesoterapia capilar: Este tratamiento, que es mínimamente invasivo, consiste en la aplicación de inyecciones con nutrientes y vitaminas directamente en el cuero cabelludo para fortalecer los folículos pilosos.
  • Trasplante capilar: Para los casos más avanzados, esta intervención quirúrgica permite redistribuir el cabello de áreas densas a zonas despobladas.

Cabe destacar que, cada caso es único, por lo que es imprescindible contar con la guía de un médico especializado para encontrar el tratamiento que mejor se adapte a tus necesidades.

Preguntas frecuentes sobre la alopecia androgénica

¿Se puede curar la alopecia androgénica?

Como tal, la alopecia androgénica no tiene una cura definitiva. Sin embargo, ¡no todo está perdido! Si se detecta a tiempo, existen tratamientos muy efectivos que pueden frenar su avance y mejorar significativamente la densidad del cabello. 

¿Cuánto tiempo dura el tratamiento?

El tratamiento para la alopecia androgénica no tiene una duración definida, ya que los resultados comienzan a verse a los 6 meses y alcanzan su máximo beneficio entre los 12-18 meses. 

La estrategia habitual que se suele emplear es realizar un tratamiento más intensivo durante los primeros 2 años y luego ajustarlo a un mantenimiento a largo plazo más cómodo y sostenible. 

¿Qué pasa si se interrumpe el tratamiento?

Si interrumpes el tratamiento, los efectos varían según el medicamento usado. Con los antiandrógenos, simplemente se reanudará la progresión lenta natural de la alopecia, manteniendo los beneficios obtenidos hasta ese momento. 

No obstante, con el Minoxidil, es probable que pierdas los resultados conseguidos, llegando a perder hasta un 50% de lo ganado en los 9-12 meses siguientes a la interrupción. Por tanto, es fundamental mantener el tratamiento a largo plazo para conservar los resultados.

Conclusión

¡Ahora ya sabes qué es la alopecia androgénica! Como ves, es una condición común que, aunque puede resultar preocupante, tiene múltiples soluciones efectivas. Aquí, la clave está en el diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado y constante.

Así que, si estás notando cambios en tu cabello, no esperes a que sea demasiado tarde. Contacta con nosotros hoy mismo para programar tu consulta y obtener un diagnóstico preciso junto con un plan de tratamiento personalizado. ¡Recuerda, cuanto antes actúes, mejores serán los resultados!

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